Un día te levantas y necesitas música diferente, otra cosa que no hayas oído nunca. No pasa nada y necesitas realmente que algo te acaricie y te acompañe en el devenir de un día rutinario. Entonces echas manos de tu cajita de música y encuentras, por casualidad algo como esto. Pasan horas, horas y horas y ves que sólo necesitas escuchar una y otra vez esta melodía que se ha colado por tus venas para acompañarte en un día, por lo demás, demasiado normal y que desembocó en algo cruel. Fusión africano-francesa multiracial y cultural para los oídos más exquisitos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario