Te olvidaste de mí

Olvidaste…

Que tu sol era el único que derretía mi hielo

 

Olvidaste…

Las promesas de un amor incipiente

 

Olvidaste…

Que el sexo no lo era todo para mi

 

Hoja seca

Olvidaste…

Que el otoño era mi salvavidas

 

Olvidaste…

Que deseaba una realidad

 

Olvidaste…
Que los sentimientos no son fugaces

 

Olvidaste…

Que la belleza no está en las afueras

 

Olvidaste…

Entrar despacio en mi vida

 

Olvidaste…

Que un rebelde también puede llorar

 

Olvidaste…

Que mi soledad era tu compañía

 

Olvidaste…

El sabor del beso antes de juntar nuestros labios

 

Olvidaste…

Que me enamoraste a tu medida

 

Olvidaste…

Que era salvaje hasta que me domaste

 

Olvidaste…

Nuestra historia

 

Olvidaste…

El primer día que pasamos juntos

 

Olvidaste…

A qué sabían los amaneceres a tu vera

 

Olvidaste…

Las melodías que nos hacían viajar

 

Olvidaste…

Descubrirte ante mi

 

Olvidaste…

Qué era lo que en verdad quería tocar

 

Olvidaste…

Que adoraba necesitarte

 

Olvidaste… recordarme,

Olvidaste… que para siempre,

nunca es demasiado tiempo para amarte…Y tú me olvidaste

2 comentarios:

  1. Me has recordado la película " el diario de Noa" muy bonita por cierto..., supongo que la habrás visto...a veces para que dure el amor es necesario recordar lo que te llevo a tal sentimiento!

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  2. Sí, vi la película. Es fantástica, una de las imprescindible en su género. Por supuesto que para que dure el amor una receta, digo yo, imagino, que será siempre tener presente lo que sucedió para que estallara ese Big-Bang. Lo que pasa es que a veces se obvia, nos contradecimos o vete tú a saber, cada historia es un mundo metido en una galaxia sublime que hay que intentar salvar siempre que se pueda

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