Ya no soy de Noruega. Estoy hablando de música y de algunos post que escribí hace tiempo en mi anterior blog. Recordaré algo. El año pasado escribí del llamado “Caso noruego”. En aquel escrito, recordaba dos canciones que se convirtieron en bandas sonoras personales, la de María Haukaas Storeng con “Hold on Be Strong”, una canción que no ganó el festival de Eurovisión por poco y luego hablé del justo vencedor del año pasado en ese certamen, el simpatiquísimo Alexander Ryback con su “Fairytale”, ese cuento de hadas que conquistó a casi todos a base de ‘violinazos’. Ambas canciones la verdad es que me enamoraron, y particularmente el porte de María Haukaas Storeng, hizo que verla fuera durante algún tiempo, mi pasatiempo favorito. La letra de su canción, además, me animó muchísimo, era como una consejera sentimental que cantó algo necesario. Luego, no hace mucho realmente, creo que ya en este blog, hablé de Moldavia en el post “Qué sabes de… Moldavia”. Pues no ha participado mucho en Eurovisión, y sus resultados han sido malos, pero en esa entrada, al final, rescaté al grupo Zdob zi Zdub, que participó en el año 2005 con una canción que, por lo menos a mí, me gustó mucho por cuestiones subjetivas, “Buna Dimineata”. Posteriormente, allá por el año 2008 se hicieron un poquitito más famosos dentro de la ex república socialista soviética con el disco Agroromántica. El año pasado participó por Moldavia Nelly Ciobanu con “Hora din Moldova”, una canción que mezclaba estilos del folk tradicional moldavo con música pop que también me gustó mucho, la verdad sea dicha.
Muy bien, pues recordado esto, tengo que decir que ayer, en Eurovisión ambos países me decepcionaron, y que realmente el nivel de ayer de todos los países en general me dejó con ganas… o con pocas de volver a verlo. Me decepcionó muchísimo. La ganadora habrá roto algún cristal con su espantoso tono de voz. En otros años Eurovisión me gustó por las rarezas que se veían (rarezas, no frikadas). Lo cierto es que no presto mucha atención, sólo a las canciones que me gustan realmente, no las que “no suenan mal” sino las que me enamoran. Y para ser del todo franco, este festival ha sido mi vivero para las categorías más complejas del inefable ‘Concurso musical’ que mis amigos y yo celebramos, por ejemplo, hace ya casi un año. Recuerdo que el año pasado llevé al concurso la canción “Todas as ruas de amor” del grupo Flor-de-lis de Portugal (no le dieron ni la hora, la puntuación fue bajísima), y que me pareció increíblemente mágica, y también llevé a Nelly Ciobanu con “Hora din Moldova”
Y bueno, en definitiva, lo de ayer no fue digno del ganador del año pasado. Alexander Ryback creo que hizo algo único el año pasado con su canción, con su actuación y con su sonrisa carismática. Ahora veo el video del año pasado y me trae gratísimos recuerdos y me vuelvo a enamorar de su letra, de su intención de todo lo que había detrás y de la energía que este adorable noruego transmitió sobre el escenario. Me pasaría horas viéndole tocar el violín. Años antes, una semi balada de María Haukaas, no ganó, pero dejó el listón alto. En el día de hoy quiero recordar, sobre todo, a estos dos noruegos a los que guardo un grato recuerdo. Rastreando cosas por Internet, encontré en un programa noruego a Ryback tocando un fragmento de I’m yours de Jason Mraz también a base de ‘violinazos’. Sin embargo, luego escuché el disco que sacó al mercado tras vencer, y fue muy decepcionante, no utilizaba la fusión extraordinaria que le había dado en Farytale al resto del disco. Por ser compositor, imaginé que haría más mezclas. Una lástima. Es cierto eso de que hay artistas de una sola canción, y ese es el caso de Ryback o de María Haukaas, y otros muchos más.
En España en general hay una tendencia estúpida a menospreciar la música de países poco conocidos o que no son super ventas. Es un poco tendente a la infravaloración de otras culturas musicales que puedan, por qué no, ganar o pelear por ganar certámenes. Se basan, como no podría ser de otra manera, en asuntos de política, sociedad o economía, pero la música, al escucharla, pierde cualquiera de esos indicadores. Y eso se obvia. Y al respecto de esto, anoche pensaba en el caso turco, un grupo de rock que participó ayer y que había ganado creo que un Gramy al mejor grupo europeo. Y yo en estas cosas soy un poco duro, pues esos premios de relumbrón no implica que sea algo fabuloso, premia la comercialidad de una canción e incluso de artistas consolidados. A mí que me digan que fulanito de tal es bueno porque ganó no sé qué gran premio que todo el mundo conoce, me dice más bien poco. Pero esto es relativo y causa de un conflicto interno, pues mis venerados Beatles ganaron muchos premios y yo los considero los mejores del mundo mundial. Bueno, paso de divagar más en domingo. Aquí dejo el último protagonista del “caso noruego”
Hace mucho que no veo eurovisión, pues una de mis mejores amigas, celebra su cumpleaños coincidiendo con este evento...y cada vez tengo mas la sensación de que es mas politiqueo que otra cosa.
ResponderEliminarGracias a tu post, he descubierto de donde salió Jason Mraz, cuando lo vi actuar en un concierto que hizo en china...con Im yours...que salía hasta bailando con un gnomo...me conquistó, siguiendo la ley de los 3 grados aproveché que un amigo vivia en california y le dije, que lo buscara(q estaba mas cerca)...que me tenía que casar con ese hombre....jajajaja Bromas aparte... buscaré esa versión de violín..!!
Ahh, no has dicho nada del "algo pequeñito..." :P
Un besito
Buenas tardes Uribarri!!! XD
ResponderEliminartotalmente de acuerdo contigo con el tema de Turquía, una pedazo de actuación y buenísima canción. La ganadora Alemania, ganó por lo de niña mona-canción facilona, pero con ritmillo. Yo hubiera preferido a los turcos pero tampoco me parece mal la ganadora. La que más me gustó fue el duo rumano, muy buenas voces, melodía dificil y para nada eurovisiva pero muy buena. http://www.youtube.com/watch?v=aMIuE6es52k.
En cuanto a lo malo del festival dos cosas, España, la canción no estaba mal, pero todavía piensan que con canciones con tan mala letra van a conseguir algo, aunque la interpretación era muy buena. Por otro lado lo que más me cabreo, y es que tras la copia por parte de Rusia (hace 2 años) d eWild World de cat stevens, ayer Dinamarca copió (menos una nota) la línea de bajos, la melodía y el acompañamiento de Every Breathe you Take de The Police, indignante.
La verdad es que Eurovisión podría empezar a llamarse de un momento a otro eurobodrio, que tostones de canciones y actuaciones, muchos superdesafinadas. No lo vi ni me interesa quien ganó, pero creo que lo que mas dará que hablar es el boicot que le hicieron a la actuación de España.
ResponderEliminar¿la canción del chico del violín, Jason Mraz, no se te recuerda un poco a la de "algo pequeñito"? Salvo que a España no le salió tan bien, ya se veía venir que algo pequeñito iba a ser el apoyo a españa, jeje.
Abrazos
:)
Blind-y: La versión de Ryback en violín es la que puse en el post, que es cortita. Todo el mundo habla maravillas de ese chico, el tal Mraz, habrá que verlo para opinar. Pero si llegas a él con esa ley dímelo y hago un estudio empírico sobre esa ley que no sé yo si está contrastada. La canción de España fue una canción chivata. Chivata porque en el título ya desentramaba que era una canción insignificante. Más simple que la canción más simple, encima con una ínfima pretensión u olor a sorpresa que yo, por lo menos, ni atisbé a escuchar. Pero mejor eso que no los friáis (qué bochorno).
ResponderEliminarÁngel: ¿Uribarri? Eso lo serás tú. Menudo destripe que has hecho. El festival fue un poco bochornoso, de muy escasa calidad. Estoy de acuerdo con que los únicos que propusieron algo diferente fueron los turcos, pero la canción tampoco era una maravilla. Alemania fue lo extraño, lo raro, pero tampoco dio para más. A mi no me gustó nada su voz, aunque el tema no estaba mal en su ritmo, y su puesta en escena simple y sin más propósitos. Yo no tenía favoritos, porque me perdí a los que daban por vencedores. A mi no me convenció ninguna canción, hubiera dejado el premio desierto por malo.
He escuchado a los rumanos. La canción es un tanto ochentera, cierto, nada eurovisiva, y tal vez hubiera merecido más, pero igualmente no la veo mucho mejor que otras. Me pareció un festival facilón musicalmente, no tan arriesgado como el del 2009, uno de los mejores subjetivamente.
Estoy de acuerdo con tu visión de la canción de España. La letra fue muy desafortunada, aunque yo supongo que por allá por esas Europas, no le prestarán mucha atención.
He escuchado la canción de Dinamarca, no la escuché anoche, seguro que en ese momento estaba cenando. Es cierto que el principio se da un aire a la de Police, pero yo no la veo tanto así como un plagio. Tiene una base similar. Carlos diría que todo está inventado en música. Pero creo que sí me ha gustado. Ha sido la única que me ha gustado de todas las que oí. Me gusta mucho. Ea, que creo que es la mejor de la noche. Hostias, SI ES QUE DEBERÍA HABER GANADO. Yo no sé tanto de música como para saber si los bajos y el acompañamiento era del tema de Police, pero me gusta mucho “En un momento como este”. Que además me viene la mar de bien.
Pero la canción rusa de la que hablas es cierto, era un mal plagio de la obra maestra del Gato Steven. En ese entonces me indigné mucho.
Ana: No sé, no me sonó demasiado Mraz con la canción española, pero es que tampoco me paré a escuchar más que las 2 veces que la oí, el tema de España. De hecho ya la olvidé. Lo malo del boicot es el bombo que se la ha dado en la prensa. Si la prensa no le da importancia, este personaje se lo piensa, pero si sale, y trasciende de la manera en que lo ha hecho, lo volverá a hacer. Es un ejemplo de cómo el periodismo ensalza a personajillos de cuarta. Se confunde el rigor con veracidad y las anécdotas son más noticia que lo que ocupa de ese festival, que es la música. Olvidan la psicología egocéntrica del individuo y muestran su torpeza. Y así nos va. Esta mañana al leer la prensa, me sentí indignado, pues el tipo ese seguro que hoy se siente importante, como si hubiera hecho una gran cosa y en lo que a mí respecta, no le daría ni un renglón en un periódico, ni en la tele, ni en ningún espacio, pues, como te dije, fomenta su minuto de gloria y su repercusión mediática a la vez que se da la espalda a la verdadera noticia…porque yo no vi un titular hablando de la “Lolita” alemana que ganó. Uf, ya está, me he desahogado.
He leído la entrada y ahora al leer lo que le respondías a Ana, he podido constatarlo. ¿El qué? Pues que eres un buen profesional de la información. Por fin en un sitio donde hablan de eurovisión, es decir tú en tu entrada, no hablan del sabotaje. Es que lo ponen en todas partes, está en primera página de youtube, en prensa, TV...en fin. Supongo que siempre hay que informar de lo que pasa, tampoco estamos ciegos, pero sin elevar la magnitud del asunto. Bravo Will!
ResponderEliminarPor lo demás, no sé bien qué decir, porque nunca me ha interesado lo de Eurovisión. Como dice mi madre, ya no es como antes...y tanto que no! No sé no me atrae nada. Siempre me acuerdo de Sergio Dalma y su Bailar pegados...qué puede haber mejor?
Un beso grande!
Virginia. Entre todos esta semana me estáis subiendo el ego como nada. Agradecido de que me "tiñas" de profesional de la información. Te quiero creer y lo voy a hacer cuando acabe de rechazar ofertas de la National Geographyc, Viajar o El País y El Mundo (uys, estos no, que no me gustan), que no paran de llamarme para incorporarme a sus filas. Capta la ironía del asunto ;). La verdad es que Ana me buscó muy bien las cosquillas para hablar del asunto. Yo me pongo ahora en el pellejo de los periodistas. Se trata de un festival devaluado, que nadie ve, que ha sido un chiste con la entrada de los frikis y que necesitan la noticia que más capte al lector. Dicho lo cual, es fácil presuponer que la gente lo leerá y se acordará de este año, no porque haya ganado Lena, sino por el capullo del boicot. Para ser justos, los periodistas han acertado en ello, porque al final todo el mundo habla del personaje de marras. Estoy casi convencido de que si titularan el puesto que alcanzó España o el ganador, la gente no lo leería o le daría igual. Lo que interesa es vender, y la cadena está clara. Yo (demandante), busco algo atractivo, tú (ofertante) te ofrezco algo raro para atraer tu atención.
ResponderEliminarSupongo que se ha perdido el valor musical. Recuerdo la actuación de Sergio Dalma. De hecho, me convertí en fan de él a raíz de su actuación y desde entonces, digan lo que digan de él y su voz, me gusta lo que canta y cómo lo canta. Por otra parte, yo desde que participó el friky español, pensé que algo de la música, de su alma, se había muerto -sí, así de exagerado soy-. Y encima la SGAE y la Menestra de Cultura han empujado a las bocas del infierno a los amantes de la música como servidor. La SGAE se ha convertido en la "Hacienda somos todo" de lo inefable que nos ayuda a sentirnos especiales.Y Glez-Sinde nos ha hecho sentir criminales.
A veces no me gusta vivir en el futuro...
Gracias por recordarme esta cancion, la verdad que cuando gano ni le presté atención pero hace tiempo se la escuché a un compa en su coche y flipé. Ibamos a todos lados con esa cancion puesta y moviendo la cabeza pa lante y pa tras como locos jejeje. He dado con un video que salen todos los ganadores desde que existe eurovision y he escuchado algunas canciones que me han encantado. Cuando las vuelva a localizar te aviso.
ResponderEliminarAdiosito!!!(con la careta de maud flanders puesta)
Danny