Dar un cachito de mí


Preparando la logística para mi trayecto a través de media-montaña, una vez realizado el último acto por “amor” romántico, me he sentado a escuchar a Marwan después de algún tiempo. Aunque menos de lo que hubiera querido, he tenido dos conversaciones muy aclaratorias que me han confirmado en mis ideas.

Mi historia es la de un chico… bastante precoz en eso de asuntos del amor. No me pregunte nadie por qué, pero el caso es que desde bastante pequeño supe qué es lo que era el amor, la atracción y el querer estar con alguien. A medida que cumplí años pasé por todas las fases y estadios que un ser humano puede pasar en ese ejercicio tan complejo como es el amar. Desde los más básicos, recónditos y feos, hasta los más bellos y fantásticos. Más, pese a todos mis intentos, y otras veces falta de intentos, no he conseguido estabilizar mi vida en ese aspecto. Y llegados a esta etapa en la que me siento muy adulto, muy metido de lleno en otro estadio complicado de explicar en pocas palabras, sí sé lo que es ser consecuente con uno mismo. Podría decir: “Me quedo en Tenerife languideciendo y autocompadeciéndome”. Pero no. ¡¡¡NO!!!! Hace tiempo que dejé de lado eso. Ahora estoy en el momento en el que hago retrospectiva y pienso: “Vale, en comparativa, puede que no haya sido para tanto, pero para como se presumía hace una década y un lustro, la cosa ha salido super bien”.

El primer recuerdo genial que tengo es el de mi novia francesa, aquella carismática y loca chiquilla que, con muchos años menos, me enseñó cosas que ya tenía que haber aprendido. Luego de muchos sinsabores y desencuentros, apareció la chica asturiana y Asturias. Esa mujer y ese lugar me cambiaron por completo. Hay un William –decir mi nombre creo que ya no me da miedo- antes y después de Asturias. Fue lástima que no escribiera todo lo sucedido allí, pero todo fue bueno. De hecho quise quedarme a vivir allí y aún pienso que en un mundo como aquel, lo normal hubiese sido acabar en mi Gijón querido, adorado y venerado por aquellas personas a las que nunca jamás los podría decir una mala palabra. Nadie me quiso como ella. La mejor decisión de mi vida fue haberlo dejado todo, trabajo, estudios, amigos y familia, y apostar por Asturias y mi chica asturiana. Cambió todo, comencé a cambiar yo. Al volver a Tenerife me juré a mi mismo que volvería a Asturias, y así lo hice, pero fue sólo de paso en varias vacaciones pero una vez hube cortado la relación con aquella fantástica mujer, la tierra astur me traía demasiados recuerdos con ella y no por mi mismo. No me hacía en aquel lugar yo solo. Me recuerdo en la Playa de San Lorenzo, en Cimadevilla, en la playa del Ayuntamiento... mirando mi ciudad tan amada, tiempo después de aquella relación y me sinceré: “Aquí ya acabó mi historia”. Aunque después me consideré asturiano de adopción, puesto que el trato recibido allí fue mejor que en ningún lugar del mundo. Aún le tengo un cariño especial a aquella tierra, pero sé que uno evoluciona, la vida cambia y como tal, hay que ser flexible con los destinos para dar buenos y consistentes pasos. Me enamoré muchas veces, hice muchas tonterías y locuras de amor hasta que llegó la enfermera cordobesa. Aquello sí que fue el principio de una precipitación de acontecimientos frenética que me ha costado mucho esfuerzo y tiempo superar. Con la cordobesa fui el amante, el tercero en discordia, el que hizo las cosas más fuertes del mundo para intentar estar con la persona que había estado en el período más complejo en asuntos de salud (escribir un artículo en el periódico pidiéndole que estuviera conmigo, ir a su pueblo en busca del que era entonces su novio, traerle sus amigas a Tenerife, etc, etc, etc...). Pero como era de esperar, salió mal. Tras ella, y casi sin solución de continuidad llegó mi última ex, de Navarra para más señas. Si tuviera que explicar todo lo sucedido, tendría que escribir mucho, muchísimo. Fue, después de mi ex asturiana, la mujer que más me marcó. Hay cosas que, por lo menos ahora, no me atrevo a escribir. Después de ella, otro desierto que llega hasta ahora.

Pero he vivido mucho con cada una de ellas, he dado tanto que me he vaciado. He sabido y sé que puedo llegar a hacer muy feliz a una mujer en todos los sentidos, he sabido, al mismo tiempo, que no soy, ni muchísimo menos, un santo. Pero pese a ello me ha faltado algo, me ha faltado el no haber cometido tantos errores o tan imperdonables como para que las relaciones se hubieran acabado. No puedo decir ahora mismo que me arrepienta de haber dejado a mi novia francesa o mi novia asturiana, era bastante joven. Quizá me haya arrepentido del affair que tuve con la cordobesa, pero desde luego de lo que sí me arrepiento fue de haberle fallado tanto y de forma tan grave a mi última ex. Si no lo hubiera hecho, seguro que ahora no estaría entre Guatemala y Alicante, segurísimo que no lo hubiera pasado tan terrible mal, seguro que casi nada hubiera salido como ha salido. Más, la vida te pone estas tesituras. De nada sirve hacer elucubraciones de qué hubiera pasado sí o si no. Sé que si al cabo de unos años acaba saliendo bien lo que estoy a punto de emprender, miraré de otra forma lo que sucedió con Navarra, más, a día de hoy, pese a que sé que no se puede volver a tras, que de nada sirve recordar, sé también que no lograré superar jamás esa ruptura y esa relación, sé igualmente que estaré enamorado siempre del recuerdo del tiempo en que estuvimos juntos. Que lo di hasta lo que no tenía, puede que tarde, quizá en principio mal, pero lo di y en el amor nunca nada es sencillo y nunca se da lo suficiente.

Ayer di mi último cachito de corazón, un trocito diminuto. Cuando regalas algo de ti con la intención de acabar siendo amado, sabes bien si ese regalo caerá o no en saco roto y, por ende, tu parte, la parte de ti que estás ofreciendo y que estás amando, será algo tan vacío para la otra persona, que a veces uno siente como si desperdiciase sangre, aire o algo más valioso que la misma vida. Y no me arrepiento de lo de ayer, pero sí que sabes cuando el amor te lleva a callejones sin salida de los que has de escapar tan pronto como te sea posible. Yo ahora mismo, en el sentido amoroso estrictamente, huyo de cualquier sinsabor, desencuentro, calabaza o rechazo. No quiero tener que superar nada más. Ahora mismo controlo mi vida completamente y me siento increíblemente feliz y orgulloso de haber llegado a este punto. Como decía Chaouen “No me daré en esta puta vida que lo que yo quiero es rellenar tus rincones (…) que el amor son tres flores que se riegan a diario”. Con esta felicidad embargante, y a falta de tres días para mis vacaciones, os dejo, ahora sí hasta dentro de un mes.

Respuestas comparativas 2005-2012


He rescatado un largo test o preguntas que me hicieron hace casi ocho años. Pensé que sería interesante dejar las contestaciones de entonces (en rojo) y poner las nuevas que he contestado. No sé si he cambiado para mejor, para peor o soy demasiado pretencioso. Realmente no me gustan estas cosas, pero en fin, salió esto.

1. ¿Te llamaron así por alguien en especial?  Pues no se. No, mi abuelo paterno fue el que lo propuso
2. ¿Cuando fue la ultima vez que lloraste? Hace 5 días. Con mi amigo Carlos, en la cafetería Crack, al recordar muchas cosas hace tres días.
3. ¿Te gusta tu letra cuando escribes? pssssé. Me gusta mucho.
4. Cual es tu comida favorita? Ninguna en particular. La pasta; la carne cabra hecha en un buen guachinche y desde luego que un buen escaldón con mojo.
5. ¿Cuando es tu cumpleaños? El 20 de octubre. Hasta lo que sé, sigue siendo la fecha oficial.
6. ¿Cual es tu CD mas embarazoso? Bertín Osborne, Wamampy, Angela Carrasco y Adamo. He aprendido a no avergonzarme en absoluto por la música que me gusta.
7. Si fueras otra persona, ¿serias amig@ de ti? Probablemente no. Rotundamente sí.
8. ¿Eres un demonio? No creo. Un poquito sí, para qué negarlo.
9. ¿Has dicho alguna vez algún secreto que juraste no decir nunca? Por desgracia, y para ser sincero, sí. Sí, y además con ello, he dañado a varias personas.
10. ¿La imagen importa? No. Absolutamente NO.
11. ¿Como demuestras tu ira? Me encierro en mi, hablo poco y trato de desahogarme en un lugar alejado de la civilización, correr, llorar, gritar, caminar...etc. Me indigno muchísimo, soy muy irracional y puedo ser tremendamente cruel, ya no me callo nada.
12. ¿Cual es tu segunda casa? El coche y el Teide. La Universidad y la Biblioteca en lugares ‘civilizados’ y cualquier montaña que esté lejos del mundanal ruido.
13. ¿Confías en los demás pronto? Depende de la circunstancias y de la persona. Sí.
14. ¿Cual era tu muñeco favorito cuando era niño? No me gustaron nunca los muñecos. No lo recuerdo, pero creo que nunca fui de muñecos.
15. ¿Que clase en el colegio crees que era la más útil? Lengua (cuando escribía y leía) y porque me ha forjado para lo que hago actualmente,  Geografía (porque es simplemente la mejor y más bonita asignatura), y Matemáticas (porque a pesar de que la no me gustaba absolutamente nada, lograr aprobarla con todo mi esfuerzo, me ha ayudado a superar retos mayores). Creo que el sistema educativo se ha creado para forjar robots y enfatizar sobre todo una cultura un tanto sectarizada que provoca la pérdida de una identidad preciosa del ser humano. Dicho esto, creo que la asignatura más útil que tuve fue Geografía porque como bien dice mi amigo Carlos, yo soy Geografía.
16. ¿Tienes un journal, blog, diario, web…? Si. Ahora mismo, cuatro.
17. ¿Usas el sarcasmo? Tal vez demasiado. Cada vez menos.
18. ¿Cuales son tus apodos? Prefiero olvidarlos todos, ya sufrí bastante por ellos. Recuerdo con mucho cariño los que me pusieron en la Universidad, y en concreto, más que un apodo, el paradigma por el que algunos me conocían: “El hombre y el ecosistema, ese es su problema”
19. ¿Harías puenting? Y parapente, y paracaidismo, y submarinismo, y… zapping, jejejejeje. No, no lo haría.
20. ¿Dejas por ahí tirados tus zapatos cuando te los quitas? Sí, soy un desastre. Sí, sigo siendo un gran desastre.
21. ¿Crees que eres fuerte? No. Sí, creo que lo soy, más de lo que nunca hubiera imaginado que podría haber sido, aunque me autoconvenzo de lo contrario.
22. ¿Cual es tu helado favorito? Vainilla, o depende del momento y de lo que haya, no hago ascos a ningún sabor, soy un goloso. Tengo devoción por el helado de Melón Cantalupo de una heladería llamado “El sueño”.
23. Talla de zapatos: 38.39 (siendo optimista). Según la marca del calzado, aproximadamente un 38-39.
24. ¿Que es lo que mas odias de ti mismo? Mi inestabilidad sentimental. He borrado la palabra odio de mi diccionario, tengo muchos defectos, pero no odio nada de mi mismo.
25. ¿Y lo que más aprecias? Mi capacidad para seguir luchando y levantarme con más fuerzas cuando estoy en lo más hondo y profundo. Mi capacidad de sufrimiento, de aguantar, de marcarme retos, de caer y volver a levantarme, aprecio haber aprendido a no abandonar nada de lo que emprendo, el ver siempre el lado positivo de las personas y de las cosas, el saber ver la forma del viento… Aprecio muchas cosas de mí.
26. ¿A quien echas de menos? Cada día de mi vida a mi padre. Echo de menos situaciones con personas, pero a alguien en concreto, no.
27. Color de pantalones, camiseta, ropa interior, zapatos? Azul es mi color, el tópico dice que “la vida es de color de rosa”, pero para mi la vida podría llegar a ser azul. Me da igual salvo el rosita. Detesto el rosita vistiéndome.
28. ¿Que escuchas ahora mismo?: “Muy lejos de ti” de Alejandro Fernández; “I’m feeling good” y “Song for you” de Michael Bublé; “Dame olvido” y “Fue por ti” de Ricardo Montaner. Popurrí de Marwan y Carlos Chaouen.
29. Última cosa que comiste: Spaguettis. Salchichas.
30. Si fueras un color, ¿cual serias? obvio, el azul. No se puede ser color, pero sería del color de las nubes de tormenta.
31. ¿Como está el tiempo ahora? Cielo azul, y nubes en las medianías. Totalmente despejado y mucho calor, aunque la temperatura comienza a descender después de una ola de calor tremenda.
32. Última persona con la que hablaste por teléfono: Yolanda. Mi amiga ‘la más violeta’
33. Primera cosa en la que te fijas del sexo opuesto: Visión general, y para ser sincero, pechos, ojos y cabello. Juro que me fijo un montón en su mirada, su expresión corporal y facial, pero me fijo muchísimo, puedo escrutar a una mujer durante mucho tiempo intentando analizar sus gestos; y por otra parte, no puedo negarlo, sigo fijándome en el pecho, pero también en su culo.
34. Bebida favorita: Depende del momento. Tengo un vicio muy tonto con el Bifrutas Tropical.
35. Deporte favorito: fútbol, senderismo, ciclismo. Cualquiera que pueda practicar, pero el que más practico es el trekking, el senderismo y últimamente estoy aprendiendo a patinar.
36. Color de pelo: prefiero el color castaño, no me gusta el pelo moreno o negro. A ser posible tirando a claro. Me da igual, no es importante.
37. Color de ojos: amo los azules, veo unos ojos azules y me pierdo. En ese aspecto, me da bastante igual el color de ojos. Si es por elegir una chica o algo, me da igual, si es por admirar o belleza, los ojos claros son bonitos de ver, da igual si azules, verdes o miel.
38. ¿Tienes un móvil último modelo? No, es de los viejos y con mucho orgullo, no soy amigo de esos trastos. Pues sí, aunque reniego mucho de él.
39. Última película que viste: Un domingo cualquiera. Diarios de Motocicleta
40. ¿Qué fue lo último que te regalaron? Si no recuerdo mal, mi conejita Nut, lo más bonito del mundo. Dos conversaciones sublimes en cuatro días.
41. ¿Y cuál sería el regalo perfecto? No creo en lo material ni en un regalo en un día determinado, creo en los detalles diarios sean lo que sea, una palabra, un gesto o simple abrazo espontáneo vale mucho más que todo lo material. De todas formas, un regalo perfecto sería estar con alguien especial. Es difícil contestar. Estar con alguien, hablando de algo que me llene. Sigo creyendo que los pequeños detalles son los mejores regalos y que el materialismo es un ejercicio de futilidad. Creo que es muy bonito regalarse cosas a uno mismo, regalarse uno mismo dando a otra persona algo de ti, da igual si tangible o intangible.
42. Día favorito del año: Ninguno en particular y todos en general si significan algo. Ninguno en particular.
43. Verano o invierno: Invierno desde siempre, pero últimamente me está dando bastante igual la estación, lo que cuenta es lo que se puede hacer en el momento y con quien se está en el momento. El señor otoño me ha ganado por razones que aún tengo que analizar en profundidad, pero los cambios que se producen son geniales.
44. Abrazos o besos: Mi medicina son los abrazos de mi amiga la “Gorda”. Pero hace mucho tiempo que necesito un beso de alguna persona de alguien a quien amar para siempre para sentirme realmente vivo, como dice Alberto Plaza en una de sus canciones, “un beso suyo es mi abrigo”. Los abrazos tienen una componente espiritual que me hacen optar por ellos, pero hace tanto que no recibo besos, que quisiera poder comparar.
45. ¿Cual es tu postre favorito? Soy un auténtico goloso, todo lo que sea de azúcar es digno de probar. Un helado en verano (o invierno), un dulce en cualquier época del año, una tarta, un quesillo.  Cualquiera.
46. Que libros estas leyendo? El que actualmente estoy escribiendo que estoy releyendo una y mil veces para lograr hacer realidad uno de mis más irrealizables sueños. Tengo una lista interminable de libros que me faltan por leer, pero los que estoy leyendo y acabaré de leer estas semanas son: “Buscando el sur” de Román Morales, “El escalonamiento vegetal de Canarias en los textos de los viajeros” de un profesor que tengo en gran estima, “Viaje por Sudamérica” de Ernesto Che Guevara y Alberto Granado; “Antropología Cultural” de Marvin Harris; y “La belleza del oficio de geógrafo” de Martínez de Pisón. Estos son los que me acompañarán en las próximas semanas.
47. ¿Que viste anoche en la TV?: Anoche no vi la tele. Desde que no veo la tele, soy super feliz.
48. ¿Rolling Stones o Beatles? Beattles, “I love her”, “all together now”, “All my loving”…..son la leche. Always Beatles forever!!!
49. ¿TV u ordenador? Hace años hubiera dicho tele, pero hoy no me cabe duda, prefiero el ordenador, la tele ya no me da nada y apenas la veo. Ahora mismo el ordenador se ha convertido más en una herramienta que entretenimiento pero de elegir, quizá ninguna de las dos opciones, la tele por razones obvias, el ordenador porque al ser una herramienta de trabajo me deja una sensación de hastío tal que quiero alejarme lo más posible de él.
50. ¿Crees en la creación o en la evolución? Creo en ambas cosas, para que hubiera una evolución, primero tuvo que haber habido una creación. Es una pregunta bastante simplona, al menos ahora no la entiendo. Sé que hubo una entropía y que, tras eso, llegó la negentropía, unas leyes básicas que crearon todo. Si creo en una cosa u otra, ahora mismo no entiendo la cuestión.
51. El lugar más lejano donde has estado: Nací en Venezuela, así que sin duda es el lugar donde más lejos he estado, pero como ni me acuerdo de aquello, el lugar que más recuerdo y que más lejos he estado es Asturias. Pues igual en el pirineo gerundés y el navarro, o Euskadi, aunque si se trata de decir cuán lejano en cuanto a civilización, en la aventura de Marruecos nunca estuve tan lejos de nada ni nadie.
52. ¿Crees en Dios? Sí. Si no, ¿cómo nació todo? Soy ateo, agnóstico. Las deidades es un asunto que no me gusta simplificar en una vana respuesta
53. ¿Monte o playa?. Depende de la situación y las circunstancias. La playa no me hace guardar gratos recuerdos, pero poco a poco se van diluyendo. De todas formas, yo siempre he sido de monte, un hombre silvestre. Montaña, soy un hombre totalmente de monte, de montaña.
54. ¿Qué crees que has sido en una vida anterior? Probablemente, un don nadie. No creo que en vidas anteriores. Esta es la vida, la de ahora, no hubo nada antes y no creo que haya nada después.
55. ¿Día o noche? Hace tiempo que las noches son un sufrimiento constante, el día no lo es menos. Depende de para que. El día para intentar ser persona, las noches para enorgullecerse de uno mismo, pero siempre con alguien que te ayude a ello. Por cuestiones de aversión a la luz, cada vez soy más umbrófilo y por ello la noche me gusta mucho, me siento cómodo en casi todos los aspectos.
56. ¿Cuál ha sido la mayor locura que has hecho en tu vida? Sólo tengo que decir una?. Media vida me la he pasado arriesgando y haciendo locuras. La última de todas fue ir con el coche al Teide en un día de temporal y quedarme atrapado en una tormenta de nieve y hielo. No lo sé, hace tiempo que ya no considero mis actos en si son o no locos, los demás creen que puedo hacer cosas fuera de lo normal o catalogarlos de locos, yo creo que sigo mi instinto, que para mí es normal, tanto ahora, como antes, no se trata de hacer locuras, se trata de intentar ser uno mismo. Tacharlo de loco es volver a simplificar algo muy bonito.
57. ¿Cuál ha sido el día más feliz de tu vida? No creo en un día especial, creo en las buenas etapas, y la mía está aún por llegar, al igual que el día más feliz, que será el día en el que cumpla mis 3 principales sueños, los más banales del mundo. He tenido muchos grandes momentos de felicidad. Pero así, el primero que me viene a la cabeza, fue el día en que supe que ya era Licenciado, felicidad que me dura y que me hace que ahora mismo sea el hombre más feliz del mundo. Me siento super orgulloso y afortunado, no sólo de ser licenciado, sino de amar la Geografía.
58. ¿Carne o pescado? Carne. Ninguna de las dos cosas.
59. ¿Te consideras mentiroso/a? Quien no haya mentido, que tire la primera piedra. No creo que sea mentiroso. He mentido mucho e igual, desde cierto punto de vista podría considerárseme mentiroso, pero creo que objetivamente no lo soy porque no es algo que haga por sistema. Intento siempre ir con la verdad por delante aunque me lleve a problemas. .
60. ¿Qué es lo que nunca te atreverías a confesarle a alguien? Cuando vea a ese "alguien", puedo asegurar que sí me atreveré a confesarlo, pase lo que pase, no soy de los que se calla un sentimiento (sobre todo si es bueno). A estas alturas creo que me atrevería con cualquier cosa.
61. ¿A dónde te gustaría viajar? Irlanda, Islandia, Noruega, Perú, Asía. Ahora mismo a Guatemala, pero por visitar, más que un lugar, me encantaría recorrer Latinoamérica, pero no negaré que aquellas semanas en las que pensé que acabaría en Nueva Zelanda fueron grandiosas, pues es un destino que me apetece mucho. Soy de destinos extraños como los ex países de la URSS.
62. ¿Te consideras romántico? más que me pese…sí. Cada vez soy más opaco, pero creo que mi romanticismo ha adquirido una nueva dimensión pero no puedo negar que sí, creo que soy una clase extraña de romántico.
63. ¿Crees en fantasmas y espíritus? No, soy de los que tienen que ver para creer algo, sea lo que sea, de todas formas me considero muy miedoso. Soy más bien escéptico.
64. Sexo, ¿con o sin amor? No concibo el sexo sin amor, es más, creo necesario el sexo con amor, lo contrario, lo rebaja tanto que por desgracia está dejando de ser tan sumamente especial como un día lo fue. Con amor.
65. ¿Crees en la reencarnación? Ni me lo he planteado, si me pongo a pensarlo seriamente....puede que sí. No.
67. ¿Te planteas tener algo con alguien de tu mismo sexo? A pesar de mis bromas al respecto, y de que muchas personas duden de mi....rotundamente no. Me he planteado tener algo con personas de mi mismo sexo, lo veo como algo natural. He sentido fuertes atracciones hacia otros chicos. No obstante, cuando he podido tener alguna experiencia, he sentido rechazo. Pero concretando, sí, me he planteado tener algo con personas de mi mismo sexo.  
68. ¿Alguna vez has nadado desnudo?: mmmm, creo que no, pero vete tu a saber lo que habré hecho hace diez años. Sí.
69. ¿A qué temes?: A la soledad, al rechazo, al desamor, a descubrir que no he vivido, a quedarme totalmente sólo, a defraudar a mi “familia”, a herir a alguien querido, a ser un don nadie, temo volver al pasado y todo lo que ello conllevaría.....temo tantas cosas que aquí no caben. A llegar al final de mis días y sentir que no he vivido o que he estado preso de mis miedos. Temo a muchas cosas pero creo que el temor, mientras no te paralice, sino que te haga avanzar, es bueno.
70. ¿Quiénes son tus mejores amigos? Carmen, Tony, Consuelo (sin orden, aunque sin Carmen, me faltaría algo demasiado grande). No lo sé ahora mismo. Creo que hay algunas personas que me han aportado inteligencia emocional y sentimental y a todos los niveles, que con cariño y algo más, han provocado que los considere muy especiales. Mi amigo al que llamo ‘el sabio’; ‘la más violeta’… ‘armonicista’.
71. ¿Cuál es tu canción favorita? Preguntarme eso a mi es arriesgarse a una contestación larga. Desde el año pasado hago una lista de los 50 principales, con las canciones más significativas del año. Este año, de momento, las canciones predilectas son: Careless Whissper (Wham), Destrangis in the night (Estopa), Noches y días (Abigail), Soledad (Bacilos), Fue por ti, Dame Olvido (Ricardo Montaner). Tengo canciones preferidas para cada momento...me es imposible decir una. Imposible decir una. “En mi cabeza” de Marwan define totalmente lo que ha sucedido dentro de mi en lo que al amor se refiere, pero ahora mismo “Semilla en la tierra” de Chaouen me hace sentir cosas muy profundas porque tiene una letra sublime. Ha aprendido a apreciar el sentido de la letra de la canción más que la melodía en si…o igual estoy siendo super pretencioso.
72. Tacos o muletillas que dices mucho. He notado que digo mucho “sabes” y luego, lo típico, hostias, cagún la puta, cachis la mar, no soy nada original. Sigo con el “sabes”, pero me procuro no repetir muletillas y no decir tacos.
73. ¿Sin qué no podrías vivir? música (está muy dentro de mi), y mujeres (me gustan demasiado, aunque pocas veces he estado con alguna). Sin hoja, bolígrafo, música y la libertad de poder ver las nubes cada día.
74. ¿A qué hora te sueles dormir?  Soy animal nocturno y siempre lo más tarde posible que no es antes de las 1 o 2 de la madrugada, pero como ahora estoy de curro, antes de las 12 en cama. Mi hora de dormir está patrocinada por una total y absoluta anarquía de horarios.
75. ¿Estás enamorado? No lo se, tengo miedo a estarlo y no ser correspondido. Me gustan dos chicas, pero no, no estoy enamorado.
76. ¿Has estado enamorado alguna vez? verdaderamente y con todo....sí. Desde luego.
77. ¿Qué te cuesta decir? nada en concreto, pero sí que me pongo nervioso, me cuesta hablar y expresarme delante de alguna chica por la que siento algo muy especial.....y perdón cuando me han hecho demasiado daño. Soy un libro abierto, no me cuesta decir nada o hablar.
78. ¿Cuál ha sido tu momento más penoso? son tantos, que no cabrían aquí. Septiembre de 2009, la operación que marcó el ser que soy ahora mismo. Estuve un mes en el hospital, me operaron tres veces y quedé marcado para toda la vida. Pasé tanto dolor físico que creo que sería inenarrable contarlo. Fue realmente el momento más penoso.
79. ¿Qué es lo que no perdonarías? Que me hirieran a mi, a mi orgullo, a mis principios, algo que me llegase tan hondo, y me hiciese tanto daño, que no es que no perdonaría, si no que directamente esa persona estaría muerta para mi. No guardo rencor, no odio, pero si me fallan, y me hieren de verdad....mi perdón es casi imposible, y digo casi por ser optimista. He adquirido la sabiduría suficiente como para perdonarlo casi todo…salvo que alguien le hiciera daño adrede a algún ser muy querido (por ejemplo, mi sobrinito).
80. ¿Estás mal? Altibajos. Todo lo contrario, soy super feliz.
81. ¿Qué es lo que no puedes aguantar? Cometer continuamente errores que perjudican a los demás y a mi mismo. Que me fallen, que me sustituyan por un plan mejor.
82. ¿Cuánto tiempo tardas en arreglarte? 5 minutos, tal vez menos. Puede que unos diez minutos.
83. ¿Cuál es tu programa de TV favorito? Ahora tal vez Buenafuente. Pero recuerdo con cariño el juego de la oca, Caiga quien caiga (el viejo, no el de ahora). Ninguno.
84. ¿Cuándo tienes un problema a quién llamas? A nadie, me cuesta apoyarme en alguien, normalmente sólo acudo a alguien cuando ya estoy saliendo del, no cuando estoy metido dentro. Depende del problema, a mi madre, a mi hermana, o a alguno de mis tres amigos de la universidad.
85. ¿Qué deseo pedirías? Para que se cumpla, no debo decirlo. No se me ocurre nada ahora mismo.
86. ¿Te irías a vivir a otro país? todo puede pasar. Con los ojos cerrados y ojala así suceda en unos meses.
87. La soledad es…una compañera demasiado habitual en mi vida, y que me tiene bastante harto. Una enfermedad.
88. ¿Frío o calor? Frío. No me gustan los extremos, prefiero el confort térmico; pero por elegir…el frío.
89. ¿Carta o mail? El mail es más informal y rápido. Pero cuando es algo importante, para alguien igual de importante, la carta tiene más valor y significado. Escribo realmente muy rápido con el teclado, lo que pienso se traduce enseguida en la pantalla de ordenador, pero una carta es un detalle tan precioso, que es algo que me ganaría.
90. ¿Eres puntual? Sí, soy medio inglés, porque no me gusta nada la impuntualidad, y desde luego, soy de los que llegan hasta antes de tiempo. Muy puntual, es más, no me gusta nada llegar tarde.
91. Descríbete en tres palabras Creo que es imposible describirme en tres simples palabras, no me conozco lo suficiente......pero aunque me quede corto, ¿por qué no hacer el esfuerzo?: soñador, luchador e insoportable. No puedo describirme en tres palabras. Me es imposible hacerlo.
92. Te enferma… La obstinación. Las personas cerradas y con nula capacidad de razonamiento o empatía. También las personas manipuladoras y que no dan su brazo a torcer. .
93. ¿Qué es lo que no falta en tu armario? El desorden. Apuntes de la carrera que se cuelan por el lugar menos pensado.
94. Personas que admiras Mi papá, y las personas que hacen algo sin esperar nada a cambio o sin atribuirse méritos. Mi amigo que llamo ‘el sabio’, llamado realmente Carlos. Su sabiduría me ha llenado.
95. El beso ideal es… El de la mujer de mi vida, la madre de mis hijos....esté donde esté ella. El próximo.
96. ¿Cantas en la ducha? Sí, es una vocación frustrada que sólo puedo llevar a cabo en la ducha....o cuando me disparato que puede ser en cualquier lugar y en cualquier momento. Cada vez menos.
97. ¿Qué es lo primero que piensas cuando te levantas? “Ánimo, tratemos de aprovechar el día” (menos cuando estoy hecho trizas que directamente me levanto con encefalograma plano). Normalmente no pienso recién me levanto.
98. ¿Lluvia o sol? Lluvia, mucha lluvia, toneladas de lluvia. Lluvia.
99. ¿Cómo te gustaría que te sorprendiera tu pareja? Simplemente apareciendo en mi vida. No tengo pareja
100. El vaso, ¿medio vacío o medio lleno? Medio vacío y medio lleno. Depende, pero ahora mismo, lleno.
101. ¿Cuándo fue tu última visita al hospital? Hace un par de añitos, por piedras en el riñón. Hace unos meses. Quiero olvidar esa experiencia.
102. ¿Dónde te ves dentro de diez años?: Me deprime esta pregunta....ojalá que con un trabajo, una casa propia, una esposa, mi primer hijo y con un perrito...si no ocurriera así.....verdaderamente estaré hecho polvo. No lo sé y prefiero no pensarlo, pero sea lo que sea, espero sentirme tan bien como ahora, tan orgulloso y henchido de satisfacción.
103. ¿Quién es el amigo que vive más lejos? Gracias a Dios, los 2 o 3 amigos que tengo, los tengo bien cerquita. En Bilbao tengo la que está más lejos.
104. ¿Qué cambiarias en tu vida? Tener más independencia, poder ayudar más a quienes amo. Poder estar en compañía, sentir amor, cariño y comprensión. No puedo contestar esta pregunta de forma escueta.
105. Película preferida: depende del momento. Una de risa: Shrek o Buscando a Nemo. Mar Adentro, Tesis, JFK, Casablanca......hay tantas y tan buenas, que ¿para que elegir una? Depende del momento.
106. Si pudieras ser otra persona, ¿Quién serías? No cambiaría ser quien soy, pero si me gustaría poder tener carisma, y sentirme apreciado, querido, y que contasen conmigo todas las personas que aprecio, que quiero y que amo. Que cuando pasen los años pueda decir: me siento afortunado (aunque no tenga dinero). Sería quién soy porque me he luchado mucho a mi mismo.
107. Algo que tengas puesto siempre y no te lo quites nunca. Mi mp3 y los cascos. El Mp3.
108. ¿Qué hay en las paredes de tu habitación? Después del cambio de vida, nada, están total y absolutamente en blanco. Mapas, muchos mapas y cosas que considero “pequeños tesoros” del tipo: postales, autógrafos, entradas de teatro o concierto.  



Son cosas que pasan....


Me marcho. La decisión está tomada. La próxima semana comenzaré mi penúltima gran aventura en Canarias con un pateo que ha logrado echar para atrás hasta el amigo más atrevido que tengo. Más de cien kilómetros por un camino zigzagueante, de subidas y bajadas sin apenas descanso, jornadas de cómo mínimo 15 kilómetros diarias a lo largo y ancho de unos diez días. La ruta, trazada a conciencia es única y exclusiva. Como me suele suceder en estos casos, han puestos el grito en el cielo. Pero es mío, mi forma de vivir la vida, la naturaleza, la geografía más pretérita. Una vez llegado a mi destino después de esos diez días, descansaré unas cuantas semanas lejos de Tenerife. A finales de agosto regresaré pero será sólo por espacio de unas pocas semanas porque a principios de septiembre marcharé definitivamente de Canarias. Atravesaré miles de kilómetros para comenzar una nueva vida. Sólo falta el pasaje, que no me preocupa, pero está la decisión tomada. Sin embargo, no será hasta el mismo mes de septiembre, cuando toque despedida, cuando diré mi destino…o mis destinos, para ser más exactos. El objetivo a estas alturas es claro: no volver nunca a Tenerife. El horizonte es mi destino. No quiero dejar de recorrer cada metro de sabiduría, de territorio. Esta isla se me quedó pequeña. Hace tiempo que sólo vivo de los recuerdos, de personas que tienen sus propias vidas hechas y en las que yo, objetivamente, no ocupo sino unas pocas líneas en un capítulo del libro de sus vidas. Me quedo con lo  bueno que he hecho, cosas que no me han agradecido, otras que sí, pero independiente de eso, quiero no pensar. Porque estos últimos dos meses en el que he estado en un auténtico limbo ha sido extraño. Hacía mucho que no me sentía tan perdido. Tenía que tomar una decisión, cuatro destinos: Guatemala (Centroamérica); Alicante (España), La India (Asia) o el recorrido por toda Europa y Latinoamérica. Sopesado a conciencia cada alternativa, la decisión llegó por inercia. Fue esta misma semana cuando tomé la decisión, sin darme cuenta realmente.


Prefiero no pensar. Si lo hiciera probablemente me quedaría, literalmente, con los brazos cruzados esperando a que alguien me dijese: “no te vayas, me haces falta”. Pero esas palabras no las he escuchado aquí nunca, al menos no las recuerdo. Sin embargo, lejos de esta isla sí he logrado escuchar esas palabras: “me haces falta”. ¿Por qué digo esto? Necesito ser imprescindible para alguien, necesito que mi saber pueda ser dado, mi cariño, mi amor y que al mismo tiempo sea correspondido. No me refiero simplemente al hecho amoroso. Me refiero a todo en general. Supongo que esto se debe sobre todo a la necesidad de sentirme agasajado y a la frustración que me produce el sentirme sobre todo muy prescindible debido a una mala interpretación de mi “independencia”.

En mi mundo el último mes me he dado cuenta de que me comenzó a gustar una chica. No sé por qué. Sólo la veía una vez a la semana, supongo que es algo más físico, aunque lo poco que sé de ella me gusta. Sin embargo este lunes me despediré para siempre de ella. Será un adiós, pero intentaré que algo quede, aunque sea durante un escaso tiempo. Sé que dentro de no mucho lograré olvidarla. No estoy enamorado. Pero no quiero ni puedo colgarme por alguien que, como todas en esta isla, no me corresponderá. No deseo realmente sufrir un nuevo desengaño e irme con resentimiento de aquí.

No he tenido celebración de mi éxito. Digamos que mis amigos han demostrado muy bien que mi salida de esta isla es algo más que justificado en tanto en cuanto no les hago falta, ni reman en la misma dirección que yo. Que puedo gritar muy fuerte, pero que nunca me escucharán, ni harán caso de mis mínimas necesidades. Y hace unos cuantos años aprendí una valiosa lección: las decisiones se han de tomar por uno mismo, y no en función de los demás. Yo quiero a un montón de gente. Por muchas personas daría todo lo que podría, todo lo que tuviera. Sin embargo, por una extraña inercia espero algo a cambio aunque de puertas afuera diga que no espero nada. Siempre se espera algo, aunque sea un abrazo.



Sí, esto es un adiós. Me queda una semana en Tenerife y lo que me quede hasta irme en septiembre. No he conseguido lo que llevo buscando desde que tengo uso de razón: una mujer que me quiera o que me corresponda. La he buscado durante mucho tiempo, luego dejé de buscar, fui impaciente y displicente, tuve mucha personalidad y otras veces la dejé de lado. Pero nunca logré que el amor de mi vida me quisiera a pesar de los pesares. Y yo, que soy muy mío, me dije que si llegado a una etapa de mi vida no lograba cumplir los más básicos sueños, cambiaría 180 º la dirección de mi vida y optaría por el llamado Plan B. Ese Plan B lo explicaré al volver de esta primera gran aventura, la última en Canarias y la penúltima de mi vida. Las cosas no son blanco o negro. Hay que avanzar y superar cosas, ya que de lo contrario, reincidimos en los mismos errores y nos volvemos acólitos de lugares o personas que no nos benefician. Y como decía amigo “armonicista”, intento encontrarme en el mundo. Y en esas estamos. Estas cosas pasan… De momento, esto es un hasta luego, hasta dentro de aproximadamente un mes. Después toca partir…

“Son cosas que pasan” - Marwan

He bajado hasta el averno y salí fortalecido (…)
le he robado la cartera a la tristeza
he pasado tardes muertas con mis culpas (…)
he tomado drogas
pasando noches enteras fuera de mi cuerpo
he bebido los licores de la más absoluta felicidad
y también me han aplastado los miedos de la infancia
he querido he odiado
fui capaz de saltar las tapias del rencor
he pedido perdón
he hecho cosas irreparables
he mentido por un beso
y he dicho la verdad aun sabiendo que así lo perdería todo (…)
he tanteado con mi mano el túnel de tus piernas
encontrando el tiempo perdido (…)
fui capaz de atrasar los calendarios (…)
he subido a trenes sin destino
he hecho muchísimas cosas por muchas personas
he ocultado mis defectos
he sufrido gatillazos (…)
hice un mundo a tu medida
me conozco de memoria los caminos
que llevan a la compasión
he sido infiel
me han engañado
he sido fiel y he dado hasta vaciarme
he firmado novecientas despedidas (…)
he sido cobarde y valiente
como quien viaja de Groenlandia hasta la Antártida
he escuchado a los árboles
me he hecho el dormido
me han abierto la cabeza (…)
y he probado la gloria tras darlo todo por perdido
he sido un calzonazos
me he gastado mucho dinero
en cosas que nunca he utilizado
me han roto el corazón de setenta maneras diferentes
y también he hecho mucho daño (…)
he viajado en business y a dedo
he visto el amor con estos ojos (…)
he hecho caso a mi cabeza y a mi corazón (…)
pero nunca
he conseguido
que me quisieras.

Embarcado en un problema



Comenzar con el verbo haber igual es un ejercicio de futilidad. ¿Qué es la vida? "La vida son palabras", me dijo alguien. Llegué a seguir a los grupúsculos y a acosar a las palabras en busca de algo que me llenara y al final el resultado fue el mismo con personas que sin ellas. Llegué a ser esa clase de gente que en un todo destaca por ser tan vano como vacuo. Llegué a ser un experto en gritar en silencio. Todo lo que tuve de especial lo perdí. No obstante, seguí siendo aficionado a determe en plena calle a escribir cualquier cosa. Y fui tan invisible como el aire. 


Ahora estoy en este barco con rumbo a mi mismo, recorriendo todas mis divagaciones, bastas como el universo infinito. Llegué a hacer llorar a las rosas, que el lunes fuera sábado y que el fenecido sonriera. Al final descubrí que todas las palabras estaban dichas, todo estaba inventado o descubierto y que la única novedad era hallar lo hollado por otros. Descubrí que sólo sentía hastío y que teóricamente era más adulto de lo que imaginaba...sí, siempre me tuve por un ser pueril. 




Un extraño torbellino de frescas nubes


Es curioso. Ya acabé mi carrera y sin embargo no la he acabado, pues la estoy viviendo a través de otros. He puesto en disposición de mis amigos mi logística y capacidad para ayudarles allí donde yo planté mi bandera. Y lo hago con sumo gusto y orgullo; primero, porque ellos me dejan que les ayude, segundo, porque me siento útil. Llevo aproximadamente diez días sin tener ni tiempo. He estado con cuatro trabajos al mismo tiempo, con un estrés tan inusitado como buscado. Este masoquismo geográfico mío es muy poco usual, casi tanto como imposible de conseguir por ahí…o eso supongo.

Pero intentaré ser breve, conciso e ir al grano. Han sido y están siendo días de locos. Los papeleos para conseguir mi título y demás para poner la preinscripción del Máster han puesto a prueba mi límite y mi paciencia. El destino es curioso. Hace unos días pensaba ¿realmente quiero hacer el Máster, irme a Alicante y todo eso? Y en eso apareció el festival de la música de La Laguna. Aquel día quedé con ‘amigo armonicista’ y esa noche, justo la noche de San Juan, escuché al destino. Vi un alicantino, con una, dos, tres minis de color rojo, me encontré un bolígrafo y conocí a una chica futura proveniente del vestigio pretérito. La primera en impresionarme en cierto tiempo. Trampa o no del destino, esa noche quedé tan tocado que caminé los ocho kilómetros que separan La Laguna casco hasta mi casa. Posteriormente el destino puso en mi camino a alguien a quien estoy ayudando a acabar nuestra carrera. Tan agradecido se ha sentido por esta ayuda altruista mía, que le confesé mi sueño consistente en un Plan B que algún día explicaré.

En una semana se precipitaron los acontecimientos. Mi amiga más violeta se iba a Bulgaria, yo quedé entre la satisfacción, la angustia y ganas por emularla. Sin previo aviso me surgió la posibilidad de un voluntariado. Puse la preinscripción para el Máster al tiempo que puse la solicitud para la ONG. El mismo día llegaron sendas respuestas. Admitida mi preinscripción para el Máster de Alicante, el destino se empeñó en admitir también la solicitud para irme a Centroamérica ¡¡¡antes de finalizar este mes de julio!!!. En principio no lo dudé, mi destino era irme a Centroamérica seis meses con posibilidad de no regresar nunca jamás. Entonces a mi amiga más violeta le llegaron noticias nuevas y comenzó a dudar en irse a Bulgaria hasta que por fin se medio declinó por el rechazo de su oferta, en paralelo yo, tras descubrir ciertas cosas y tener una reveladora charla, descubrí que el viaje a Centroamérica era un nuevo soslayo de algo que no tenía que ver conmigo, sino con otra cosa: el Plan B aún no podía ser puesto en marcha.

Y llegamos al plan inicial antes de todo esto: pateos al límite. Sí, había planificado un viaje en este verano: Berlín, Praga, Dublín y el infinito norte. Sin embargo… los planes tienen una componente de improvisación. Hoy me he decidido por recorrer un territorio inexplorado por mí con una mochila, un saco de dormir y muchas semanas por delante. Ya alguno ha puesto el grito en el cielo ante tal atrevimiento, sin embargo estas piernas necesitan su homenaje, mi cabeza y yo mismo necesita volver a entrar en contacto con la soledad y compañía de la naturaleza, encontrarme a mi mismo para saber buscar esas verdades absolutas que habitan en mi furor interno.

De momento no habrá más investigación geográfica, mi destino volverá a ser incógnita para el público general, de nuevo un viaje con ida sin vuelta y sin pensar en el tiempo que tardarán mis pies en llevarme hasta un destino ambiguo, pues el último lugar no está descrito, ni apuntado en mi mapa (porque ya tengo el mapa con las rutas trazadas). Emulando lo sucedido en Marruecos, volverán a haber etapas, a faltar agua, incluso comida, mucho calor y probablemente con algún extravío de cordura. Antes de irme dejaré lo del Máster encuadrado pero la cosa a día de hoy está así: Si en septiembre me admiten en el Máster y tengo posibilidades económicas, me iré; si no puedo y estoy mentalizado, me iré a Centroamérica a comenzar mi nueva vida (Plan B), y si me tengo que quedar aquí por vaya a usted saber qué motivos, seguiré con mis investigaciones geográficas sobre el clima, la geografía regional y otras cositas que prefiero guardarme. ¿Y si no pasa nada de eso? Orgulloso estaré de improvisar para hacer algo que me satisfaga.

Creo que como resumen no está nada mal de lo que han pasado estas semanas. Ah, y no, lo de mi amiga más violeta no tiene nada que ver con mis decisiones, simplemente ha sido un decorado de fondo. En fin, supongo que ahora mismo soy un hibrido entre un barco a la deriva, una brújula tramposa y una veleta descontrolada aunque con un punto positivo: que ya comienzo a creerme lo que soy, y poco a poco me voy sintiendo tan henchido de orgullo como admirado por mi mismo. Allí donde nadie ha sabido reconocerlo ni celebrarlo, yo sigo poco a poco mis pasos hasta creer lo conseguido, no para colocarme en ningún púlpito, sino para comenzar la siguiente etapa…sea cual fuere ésta. ¿Qué habrán hecho esos nortes para querer buscar tantos sures…?

Ojala pudiera encontrar tiempo y fuerzas para escrutar cada sentimiento, cada palabra, cada significado de cada ráfaga de aire o viento. Lo que sí tengo claro es que esta nueva etapa ha entrado por mi vida como un vendaval incontrolable. Y aunque sea una contradicción ambivalente y solipsista, creo ser un acólito de un navegar nuboso y divagante. Creo que yo soy mi Alisio…sólo me falta tierra a la que bañar…

Una canción que no he podido incrustar pero que da sentido a estas palabras: